Thursday, August 25, 2005

UN PERRO DETRAS DE LA LÍNEA

El transporte público, como siempre, era muy lento y más para aquel rumbo a horas no muy favorables. No estabamos tan apretujados, pero si había cierta sensación de presión y más con este calor de primavera. Todos nos vemos, imaginando una posible vida para cada uno de los que en el vagon estamos; estabamos en eso, cuando del pasillo un perro amarillo-naranja, de unos 5.7 años, se acercaba sigilosamente al vagón, supongo que la mayoria nos desconcertamos, pues no es muy común ver a un perro, sin dueño, a esas horas y menos en el metro. Él debería estar en su casa, cuidando de ladrones o ladrando a transeuntes, o comiendo, durmiendo, o de menos intentando alcanzar su colaaa¡¡¡¡¡¡¡ Pero nooo, estaba ahí, en el metro, solo, con la lengua de fuera, la cabeza bien en alto y las patas detras de la línea amarilla, intentando resguardar su perruna persona.