Cuando me dirigía a la Unidad de Medicina Experimental de la UNAM en el Hospital General de México, lo vi por primera vez, con su bata blanca, al igual que su cabello.
"Arriba, vamos arriba", dijo con su voz hipocrática. Llegamos a su oficina (¿o su laboratorio?)y a partir de ahí, nos regaló la mañana más increíble que jamás había pasado.
Además de muchas perlas, nos regaló este libro y, en él, parte de su vida, y que ahora será parte de la nuestra.
Esto escribí, con tinta roja, en la primera página de este libro, ese día en que el Dr. Ruy nos regaló este libro en que nos cuenta la historia del joven que vive y desvive en el mundo hasta llegar a ser parte de lo que es ahora Ruy Pérez Tamayo: un médico, un investigador, un ser humano...
Con la promesa de una cita para una entrevista (ya hecha, claro, y que disfrutamos bastante mis amigos Halley, Humberto, Miguel y yo)salimos ese día, satisfechos de haber hablado tanto con el Dr. Ruy.
Nos lo dijo, y pienso no está mal decirlo. Nos ha contado que al morir, se publicará otro libro suyo llamado: LA TERCERA VUELTA, que será más bien una biografía personal.
Espero leer ese libro algún día, pero realmente estoy seguro, si pudiera, cambiarlo por todos los que aún está escribiendo.
Un abrazo para el Dr. Ruy, agradecido de tan amable atención para una bola de medicoblastos ilusionados de poder captar algunas citocinas de una célula inmortal.
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